Aumenta el ámbito de actuación de Surbisa, que desde hoy suma un parque de casi un millar de viviendas a su órbita. La sociedad de rehabilitación del Ayuntamiento de Bilbao ha ampliado sus áreas de intervención para apoyar la rehabilitación de edificios, viviendas y locales de los barrios de Uretamendi-Betolaza, Uribarri, Matiko y Zurbaran-Arabella. El Pleno municipal ha dado hoy luz verde a la propuesta de ampliación del marco geográfico de actuación de la sociedad para que pueda incentivar y facilitar a las personas residentes en estas zonas un proceso de regeneración de sus edificios, viviendas y locales. Hay que tener en cuenta que a medida que transcurren los años el parque inmobiliario envejece y hace falta extender las áreas de intervención; sobre todo, en barrios con elevados índices de vulnerabilidad, ya sea por renta, edad o tasas de dependencia.

 

Surbisa redactó hace ya más de una década, en 2011, un estudio de zonas preferentes con necesidad de rehabilitación en Bilbao de los edificios de la ciudad con más de 50 años de antigüedad y con indicadores de vulnerabilidad. «Con ese estudio como base, Surbisa ha ido ampliado sus zonas de intervención, atendiendo a la evolución de los indicadores de vulnerabilidad, la necesidad, la oportunidad y/o la demanda vecinal», explican fuentes municipales. Desde entonces la sociedad pública ha trabajado en Zorrotzaurre, Olabeaga, Irala, Zazpilanda y San Ignacio, además de Casco Viejo, Atxuri, Barrio la Cruz, Bilbao la Vieja, San Francisco, Zabala y Barrio Ferroviarios.

 

«Durante este mandato municipal, desde el Área de Regeneración urbana, a través de Surbisa, hemos podido dar por concluida la gestión de rehabilitación en Zorrotzaurre y hemos avanzado mucho en Olabeaga y Zazpilanda. Por eso, nos planteamos estudiar otras zonas de posible ampliación, y hemos identificado con mayor prioridad a Uretamendi-Betolaza, y a Uribarri, Matiko y Zurbaran-Arabella», ha explicado Ivan Calderón, concejal de Regeneración Urbana del Ayuntamiento de Bilbao.

 

Uretamendi-Betolaza cuenta con 219 edificios, de los cuales 75 pertenecen al grupo de casas del Barrio Betolaza que son construcciones de baja densidad en ladera, con necesidades de accesibilidad y de conservación, otras 36 son casas organizadas en hilera, de planta baja más dos, servidas por una galería común y el resto son mayoritariamente edificios organizados en grupos homogéneos de parecida edad constructiva, e igualmente con necesidades claras de conservación y accesibilidad y sin aislamiento térmico.

 

Por su parte, en los barrios de Uribarri, Matiko y Zurbaran-Arabella se encuentran determinadas secciones censales y grupos homogéneos de edificios, en un total de 643, de diferente tipología constructiva (de madera, de hormigón, grupos homogéneos, edificios en manzana,…) con necesidad de rehabilitar y necesidad de dotarles de accesibilidad por carecer de ascensor

 

En ambos casos, la población residente presenta indicadores de vulnerabilidad, como son el nivel renta familiar, de tasa de paro, de tasa de ocupación, de nivel de dependencia, de instrucción, de edad de la población, etc.

 

Además, en las zonas que se cumplan los requisitos de Gobierno Vasco se propondrá su declaración de Rehabilitación Protegida, para que puedan beneficiarse de mayores ayudas económicas autonómicas, que Surbisa tramita como ventanilla única.

 

Las ampliaciones del ámbito de actuación de Surbisa salieron adelante por unanimidad, salvo para Uribarri, Matiko y Zurbaran-Arabella. Sobre este asunto Elkarrekin-Podemos se ha abstenido porque, a juicio de su portavoz, Ana Viñals, computar la vulnerabilidad por secciones censales dejaría fuera de las ayudas a familias que, necesitándolas, no residan en una de las zonas señaladas. De hecho, la formación morada pide que el ámbito de actuación de la sociedad pública se extienda a todo Bilbao. El concejal Calderón replicó que las ayudas a la rehabilitación procedentes de los fondos europeos Next ya llegan a toda la ciudad. Para el resto, se ciñen a las zonas degradadas que son calificadas de esta manera en función de los criterios del Gobierno vasco.